Religión
Para mí no hay más religión que mis manos sedientas,
más cruz que mi alma solitaria,
más templos que mi cuerpo,
más Biblia que mis ideas,
más credo que mi éxtasis autoprovocado,
más mandamientos que mi consciencia.
Y aún así soy una atea empedernida.
Ana Cristina Chávez Arrieta. Venezuela.
Comentarios
Publicar un comentario